Dos son las cuestiones que vamos a tratar en el presente artículo. Por un lado, vamos a hablar de las lesiones más frecuentes en los accidentes de moto. Por otra parte, trataremos de un tema de gran interés, como es el de qué hacer en caso de sufrir un accidente de moto. Trataremos cada uno de estos temas por separado.
Lesiones frecuentes en un accidente de moto
Hace unos diez años muchos de los accidentes de moto resultaban mortales. Hoy en día, sin embargo, la mortalidad en estos accidentes ha disminuido en un 52% aproximadamente. No obstante, las víctimas siguen sufriendo lesiones en un accidente, algunas de las cuales son bastante graves.
Este es el caso de las fracturas de huesos. Se trata de las lesiones de gravedad que suelen producirse en los accidentes de moto. Los huesos que más suelen fracturarse son los de las extremidades. La ruptura de una extremidad, sea un brazo o una pierna, deja a la víctima temporalmente incapacitada y con graves secuelas que se han de valorar y reclamar.
Además de las lesiones anteriores, también son frecuentes las lesiones cerebrales. Estas son más graves que las fracturas de huesos, pudiendo causar incluso la muerte, cuando no someter a la víctima en un estado de completa dependencia. No obstante, en los últimos años las lesiones de esta gravedad han disminuido considerablemente.
Menos frecuentes son las lesiones de órganos y de la columna vertebral, aunque su gravedad sea en bastantes casos muy superior a la de las fracturas de extremidades y algo inferior que algunas lesiones cerebrales.
Qué hacer en caso de accidente de moto
Nadie nace sabiendo y mucho menos sabiendo qué hacer en caso de accidente de moto. Por ello te daremos a continuación una serie de directrices a seguir, para actuar de la mejor manera posible en caso de que seas víctima de un accidente de moto:
- Lo primero que tienes que hacer al sufrir un accidente de moto es ponerte a salvo, sobre todo si caes en mitad de la vía. Ya has sufrido un accidente y si tu estado te lo permite, evita que te atropellen.
- Después, cálmate, es esencial. Evita discutir con el resto de implicados
- Rellena el parte amistoso. Si alguno de los demás implicados en el siniestro se niega a firmar el parte, entonces debes llamar a la policía, para que realice el atestado policial.
- Recoge todos los datos que puedas. Si tu teléfono tiene cámara de fotos o de vídeo, saca fotografías o grábalo todo. Además, toma nota de los datos de todos los implicados y de los testigos.
- Acude al hospital más cercano para que te examinen. Hay casos en los que puede parecer que no te ha pasado nada, pero las apariencias engañan. En efecto, ciertas lesiones pueden no aparecer hasta pasado un tiempo.
Por último, de cara a reclamar posibles indemnizaciones, recuerda recopilar toda la documentación pertinente. Los informes médicos, el parte amistoso, el atestado policial, las facturas de posibles reparaciones y gastos sufridos, etc.
Casos de éxito de accidente de moto con conductor y ocupante lesionados
Nuestra clienta sufrió lesiones cuando circulaba como ocupante de la moto de su marido. La compañía no quería pagarle por considerar que el siniestro no estaba acreditado. El abogado de la compañía rechazó defender su asunto y la perjudicada se puso en contacto con RDI Servicios Jurídicos. Al cabo de dos meses había cobrado la indemnización que le correspondía sin tener que ir a juicio.
Otros nuestros clientes sufrieron un accidente de tráfico cuando iban en su moto por una calle céntrica de Barcelona, cuando de repente otra moto les alcanzó por la parte trasera.
Los clientes fueron atendidos en urgencias, pero no en el Hospital más cercano a su domicilio y les diagnosticaron varias lesiones, quemaduras y policontusiones. Todo parecía que iba bien, pero decidieron consultar con RDI los derechos que tenían contra el que provocó el accidente y se pusieron rápidamente en nuestras manos.
Desde RDI se hicieron las gestiones administrativas para que fueran visitados periódicamente en el Hospital más cercano a sus domicilios y para que pudieran acudir a Rehabilitación al centro que más les conviniera, al igual que se reclamó por los daños de la moto que la compañía no quería pagar.
Se consiguieron acreditar las secuelas que sufrían y les indemnizaron por una cantidad que ni ellos mismos se podían imaginar.
Para terminar, desde RDI se recomienda acudir siempre a abogados independientes de las compañías de seguros para reclamar la máxima de las indemnizaciones, como ocurrió en este caso.